El propio Comisario Europeo de Empleo y Asuntos Sociales ha cuestionado el uso de los minijobs como “bálsamo de desempleo juvenil” y señala, en la presentación del Informe sobre la evolución del empleo en Europa en 2011, que en Alemania –país de referencia para CEOE en el tema de los miniempleos- ha aumentado el número de trabajadores pobres, a pesar del fuerte incremento de minijobs que se han producido en el país.
El crecimiento del empleo parcial sobre la base de miniempleos, sólo ha contribuido a generar un mayor número de trabajadores instalados por debajo del umbral de la pobreza.
En Alemania, el aumento de los minijobs ha significado el aumento en más de 1 punto del número de trabajadores pobres. Estos datos son también conocidos por CEOE, que no los ha expuesto ante la opinión pública tratando así de que cale la idea de los miniempleos entre los jóvenes y parados de larga duración para que éstos acepten la tesis de “cualquier trabajo vale tengan o no derechos vinculados al mismo”. Rosell ha estado a punto de reintroducir en nuestro país la esclavitud.