El PP continúa fiel a su actuación que no –en teoría- a su
Programa. El traspaso de “capital y de rentas”, que significa su forma de
actuar en el entorno sanitario, es la fórmula más acabada para beneficiar a los
sectores privados.
La derecha –sea nacional o nacionalista- ha encontrado en el
ámbito sanitario y su entorno –industria farmacéutica, servicios
complementarios- un filón que, bajo la excusa de mantener la calidad y los
servicios sanitarios, les sirve para que la sociedad tenga que enfrentarse,
casi sin alternativa, tanto a la privatización de la gestión hospitalaria, como
a los recortes en la prestación de los servicios –con los aumentos en las
listas de espera o el cierre de las instalaciones- o, como ahora en Cataluña,
con el “repago” de las recetas emitidas.
En unos casos el PP con su acción, como en Madrid o Castilla
La Mancha , y
en otros casos con su omisión, como en Cataluña, recorta los derechos de los
ciudadanos. Recorta lo público para ceder cada vez más parcelas al capital
privado y a las grandes multinacionales.
La salud es un derecho con el que el PP no puede jugar,
Impidámoslo.