El proceso electoral que el próximo
día 25 toca a su fin, es uno de los más intensos que en éstos últimos años
hemos afrontado. Nos toca pensar y decidir si queremos “cambios” y donde los
queremos. Para nosotros y nosotras, de forma mayoritaria, los cambios parecen
claros.
Queremos profundizar en políticas
sociales públicas: Educación, Sanidad, Dependencia, Igualdad, Inserción,
Vivienda, …, y queremos más resultados prácticos que los obtenidos hasta ahora.
Necesitamos más guarderías, más hospitales y centros comarcales de salud, más
viviendas sociales, mas residencias públicas de mayores, …
Queremos también que estas políticas
sociales se impulsen, desarrollen y gestionen desde lo público, evitando así el
trasvase de renta y dinero público para el lucro y el beneficio privado.
Queremos más y mejor empleo,
forzando que los Planes que se elaboran para Sevilla, Cádiz o Jaén, se cumplan.
Que los proyectos públicos se ejecuten desde la transparencia y la eficacia y
que, los privados, se analicen y sean seguidos para evitar que tras 3 ó 4 años –una
vez amortizada por los empresarios privados la ayuda pública obtenida- se
cierren o trasladen fábricas o empresas.
Queremos apostar más por nuestros
sectores estratégicos industriales –aeroespacial, energético, …- pero que también
se apunte de verdad y por derecho a la agroindustria y a la transformación de los
productos de nuestra agricultura.
Queremos que sectores
tradicionales y punteros como el turismo, se cuiden y mejoren para que dejen de
ser elementos “estacionales”. Queremos recuperar una construcción orientada a
la rehabilitación de viviendas o de centros y cascos históricos, que se hagan
viviendas sociales e infraestructuras públicas.
Queremos, por tanto, empleo, políticas
sociales y desarrollo para toda Andalucía. Lo queremos desde la aportación de
todos y todas con los recursos de todos y todas. Por ello necesitamos una política
que, en el tramo fiscal que controla la comunidad, sea realmente progresiva y
haga pagar más a quien más tiene y pueda ofrecer más a quien más lo necesite.
Por estas características, no nos
valen todas las ofertas políticas y no nos valen los partidos de derecha que no
creen en lo público como factor de cohesión y de igualdad. Nosotros afirmamos
que sí hay ideología y que –independientemente de la gestión- hay valores e
intereses que defienden y representan la izquierda y la derecha. Por eso, ni
PP, ni UPyD, ni el centro-derecha nacionalista andaluz pueden darnos lo que
queremos y necesitamos.
Tendrá que ser una política de
izquierda quien nos ofrezca y atienda en nuestras peticiones, y ello implica
dos cosas: que las aplique un partido de izquierda y que todas sus políticas, también
la económica o la fiscal entre otras, sean de izquierdas y por tanto diferentes
a las impulsadas en éstos aspectos, por el actual Gobierno Andaluz.
En Andalucía hoy la alternativa
que puede atender nuestros intereses y deseos es, desde nuestro análisis,
IZQUIERDA UNIDA, quien –por cierto- el 29 de Marzo estará con nosotros y
nosotras en los piquetes y en la Huelga
General , a diferencia de otros que acudieron a las pasadas
manifestaciones.
Para el próximo domingo, buena
reflexión y buena elección.