En Sevilla y su provincia, como en la gran mayoría de los nuevos gobiernos municipales, se ha instalado como permanente música celestial la "preocupación por el empleo".
Esto lleva a que especialmente los nuevos regidores –como es el caso de Zoido en Sevilla capital- hablen de empleo estable y “constante”. No sabemos si la constancia se refiere al crecimiento “constante” del empleo o por el contrario se usa como sustitutivo de no temporal e indefinido ya que se habla de empleo “constante” o, quizás, sea todo lo contrario, empleo temporal y rotativo que, uno tras otro, es “constante”.
No hay propuestas para este empleo estable y "constante" mas allá de citar elementos genéricos y comunes, aunque ahora si –curiosamente y a toro pasado después de que el personal haya votado- , se advierte que el empleo no se puede crear ni por decreto ni por ordenanza municipal y que, además, los ayuntamientos no tienen competencias en empleo. ¿Ahora se entera Zoido? ¿Con él en la oposición el gobierno municipal podía crear empleo a golpe de ordenanza y decreto?
El nuevo equipo de gobierno –en nuestra ciudad y en otras localidades- habla de atraer inversiones bajo la perspectiva de “bajar impuestos o liberalizar suelos” ¿Han caído en la cuenta de que eso significa recaudar menos ingresos y “malvender” patrimonio público municipal (suelo público) bajo la falsa esperanza de “atraer a inversores” que, como los mercados, siempre pedirán más y más. ¿Acaso Zoido –en el caso de Sevilla ciudad- no ha escuchado al presidente de CEOE Joan Rosell decir, en el foro de Aznar (FAES), que: “Si a los empresarios no nos dan mas libertad para contratar y despedir, invertiremos en otra parte…”? Rosell por tanto -hay que advertir inmediatamente a Zoido- pasa de impuestos y de suelos.
Si caen los impuestos y la recaudación, ¿cómo se mantendrá el empleo público? Hay que incluir en este el de aquellos pocos eventuales de Tussam –que no todos-, que Zoido ha “colocado” por quedar como un alcalde cumplidor, sin atender los razonamientos que los profesionales de la empresa le hicieron sobre lo innecesario de esta medida. ¿Sin ingresos, cómo pagará el sobrecoste de la nueva estructura directiva del ayuntamiento? Por cierto, más cara esta que la anterior.
Sin proyectos ni propuestas, y sin nuevas vías de ingresos, el equipo de gobierno –este y otros- venderán humo para hacer creer que la preocupación esencial es el empleo. Lo mismo hace Rosell y la CEOE, pero hasta ahora los hechos de unos y de otros nos dicen lo contrario.