Hoy comienza una nueva legislatura para muchas instituciones locales que, a su vez, marcaran el futuro de otras tantas comarcales o provinciales ligadas a la vida municipal. CCOO debe ser garantía del mantenimiento de los derechos laborales y de los servicios públicos en todas y cada una de ellas.
En muchos municipios se iniciará a partir de hoy una “feria de auditorías, balances, facturas pendientes, …” que pueden esconder la pretensión de justificar recortes; algo que se ha convertido en este último año en un “vicio municipal”.
Nuestro compromiso, recién contraído con los trabajadores y trabajadoras de la administración local muy recientemente, por medio de las elecciones sindicales, ha sido claro: CCOO no consentirá ni pérdida de servicios ni de calidad en la prestación de los mismos. Igualmente no admitimos que externalizaciones, encomiendas u otras formas de gestión den paso a privatizaciones encubiertas; sobre todo en empresas municipales.
Creemos que en estos momentos de crisis el mantenimiento del volumen del empleo público nucleado en tornos a los ayuntamientos, sus empresas municipales, sus organismos autónomos, mancomunidades y diputaciones son un elemento vital de mantenimiento del consumo y la actividad económica en muchas localidades y poblaciones, al tiempo que también son una fuente de compromiso con los ciudadanos y ciudadanas y, muy especialmente, aquellos servicios relacionados con la educación, la sanidad, la dependencia, … por lo que no aceptaremos ni recortes ni modificaciones injustificadas.
A las fuerzas políticas que hoy toman posesión en los municipios el 22-M les dio legitimidad. A nosotros las elecciones sindicales también nos la dieron y nos la dan día a día para defender los intereses de los trabajadores en su doble condición de prestadores y receptores de servicios públicos.
