El Gobierno de la Junta de Andalucía ha dado un salto cualitativo en lo que a incumplir se refiere, ahora ha adoptado la forma siguiente: para salir de un conflicto, la Junta efectúa una propuesta que satisface a todas las partes, a la semana siguiente incumple su propia propuesta.
Este avance “cualitativo” no debe extrañarnos ya que, si incumplen acuerdos firmados con toda “la pompa y boato“ que da lo público –léase acuerdos de concertación social suscritos con patronal y sindicatos-, como iba a dar cumplimiento a acuerdos con un “rango menor”.
Nos referimos al incumplimiento efectuado por la Junta en el pago necesario que asegure las retribuciones provenientes de las pólizas suscritas de miles de trabajadores y trabajadoras prejubilados, pero también nos referimos al incumplimiento que la Junta lleva a cabo de forma sistemática, reunión tras reunión, con los trabajadores de las antiguas Boliden, Delphi, Isofoton,…etc.
El Gobierno de la Junta , especialmente la Consejería de Empleo, empieza a estar en tiempo de descuento y el máximo responsable del Gobierno andaluz debe dar la cara y solventar los incumplimientos de sus consejeros porque, de lo contrario, “con Rubalcaba y sin Rubalcaba”, la política de incumplimientos del PSOE al frente del Gobierno de la Junta estará allanando aún mas el camino del PP hacia el Palacio de San Telmo.
Los ERE´s han significado mantenimiento –parcial o total según fuera el caso- del empleo en muchas empresas, pero sin embargo hoy son socialmente vistos como un instrumento de “engaño”. Los culpables de esa percepción social hay que buscarlos en el Gobierno andaluz y muy especialmente en la Consejería de Empleo.
Hoy ante San Telmo acampan trabajadores y trabajadoras que exigen a la Junta que cumpla como ellos cumplieron. Mañana en la Dirección General de Trabajo, en la Consejería , en la Delegación o en cualquier sede administrativa, los trabajadores de Boliden, Delphi, …etc, exigirán encerrándose en ellas una nueva solución, teniendo claro que esta vez las organizaciones sindicales deben exigir garantías reales sobre las propuestas que el Gobierno andaluz efectúa penalizando de alguna forma su incumplimiento.
Griñán, como Presidente del Gobierno de la Junta , y el PSOE, como partido que sustenta el Gobierno en la misma, deben dar la cara o asumir que su ineficacia y sus incumplimientos darán paso a un gobierno del Partido Popular en Andalucía.